El museo ha recreado en una de sus zonas laterales parte del Taller de Ajuste de la Ferrería de San Blas, que se encontraba en un edificio anexo a la fábrica en la época de funcionamiento de la misma.
Próximo a la Casa de Máquinas de la Ferrería de San Blas se encontraba el Taller de Ajuste, donde se realizaban las operaciones de torneado, construcción y reparación de los diferentes componentes necesarios para el correcto funcionamiento de la fábrica.
El edificio tenía mas de 360 m2 de superficie de trabajo y 7 metros de altura, dispuestos en dos plantas de 24 m de largo por 8 de ancho, y en su interior se disponían las máquinas necesarias para atender las contingencias que se pudiesen producir en la Ferrería, tanto en lo referente a la construcción, como a la reparación de toda clase de elementos de las máquinas, sin tener que depender de repuestos costosos y difíciles de conseguir que en su totalidad procedían del extranjero.
Las máquinas herramientas principales de las que disponía el taller eran un torno, empleado básicamente para desbastar y tornear los cilindros de los trenes de laminación, un cepillo usado para acepillar y pulimentar todo tipo de llantas tanto de hierro como de bronce y un taladro destinado a la realización de agujeros de diferentes medidas en chapas y elementos de hierro o bronce. Todas estas máquinas fueron fabricadas y compradas a partir de 1850 a la empresa inglesa James Nasmyth & Company de Manchester, empresa que en aquellos años era la mayor proveedora de este tipo de maquinaria en las Ferrería de la zona siderúrgica francesa de St. Etienne y Creusot.
El Taller de Ajuste también acogía la moldería, así como la carpintería de la fábrica, donde se construían en madera los modelos que posteriormente servirían para el moldeo a la arena de las piezas y elementos de fundición en el taller de fusión o Fundería, ubicado a los pies de los hornos altos. En la planta superior había un amplio almacén de modelos con gran cantidad de ejemplares de las piezas moldeadas en las instalaciones.
La recuperación y restauración de algunas valiosas máquinas originales de este taller, como el torno y el taladro, hace posible entender el importante trabajo de esta dependencia de la Ferrería.